Por primera vez en 25 años, los New York Knicks regresan a la final de la Conferencia Este. El viernes, los Knicks arrasaron a los Boston Celtics con una victoria por 38 puntos en el sexto partido de las semifinales de conferencia, avanzando a su primera final de conferencia desde el año 2000.
Con los Knicks liderando la serie 3-2, las expectativas eran altas para el partido en el Madison Square Garden, con algunas de las entradas más caras de la historia. Pero Nueva York superó las expectativas, aplastando a Boston por 119-81 y avanzando a la final de conferencia.
Los Knicks controlaron el ritmo en la primera mitad, construyendo una sólida ventaja. Aunque Nueva York tuvo dificultades con el tiro en ocasiones, no importó: los Celtics tuvieron aún más dificultades, con Jaylen Brown aportando él solo la mitad de los puntos de Boston. Cuatro actuaciones de dobles dígitos de los Knicks en la primera mitad dieron a Nueva York una ventaja de 27 puntos en el medio riempo.
Al final del tercer cuarto, esa ventaja había aumentado a 35.
La situación empeoró para los Celtics, ya que Brown, su máximo anotador, fue expulsado por faltas a mitad del tercer cuarto. Brown terminó con 20 puntos, tras anotar 18 en la primera mitad. Pero sin Tatum ni Brown en la cancha, Boston se vio completamente ineficaz en ataque.
Los Knicks mantuvieron la intensidad en el último cuarto para asegurar una victoria por 119-81, con la entrada de los suplentes de ambos equipos para terminar el partido.
Fue un verdadero esfuerzo de equipo para Nueva York: Seis jugadores de los Knicks terminaron con más de diez puntos, y cuatro de ellos lograron actuaciones de 20 puntos. OG Anunoby y Jalen Brunson lideraron al equipo con 23 puntos, mientras que Mikal Bridges anotó 22 puntos y Karl-Anthony Towns añadió 21 puntos y 12 rebotes.
Nueva York superó a Boston en todas las estadísticas, pero el rebote fue particularmente letal: los Knicks superaron a los Celtics en rebotes por 55-36.
